Sé que muchos se han alegrado con su cese, pero creo que su cese representa el fin de un tipo de periodismo libre e independiente: libre por defender la propia opinión e independiente porque no dependía ni de unos ni de otros para expresarla; ni siquiera del poder económico que sustenta a unos y otros. Personalmente lo echaré de menos, pero al menos con él he aprendido que la corrupción no sólo hay que denunciarla cuando la ejerce el otro. Gracias Pedrojota.