12 septiembre 2015


Y solo hacia el final descubres que la vida no es tuya, que es algo te ha sido prestado y que simplemente la representas durante un tiempo; como también comprendes que el tiempo no tiene un sentido progresivo, o de avance, sino de retroceso, de cuenta atrás, de cumplimiento.

Mi hijo Juan con su hijo Robert. Foto: JB

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenos días.

Enhorabuena a los tres.

Bueno, y a todos los demás de la familia.