29 mayo 2016


Cuando era niño no los podía soportar, con sus botones y sus pantaloncitos cortísimos, con sus camisas paramilitares, con sus lazos al cuello y sus boinas ladeadas, siempre tan prepotentes, tan marciales y sin complejos. Ahora los veo representados en esta espantosa escultura que los homenajea en el Jardín de la Seda y me reafirmo en todo el "medio pelo" de la organización. Se trata de los Boy Scout.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenos días.

De acuerdo en todo.

Anónimo dijo...

Pues hacen una tarea magnífica con y por los chavales, majo. Si hubieses participado o la conocieses mejor seguramente tendrías buena opinión.

Anónimo dijo...

Lo mismo que el anterior comentario. Lástima que te den grima sus pantalones cortísimos, sus botones y sus camisas paramilitares ( en el caso de los scouts de España, que no en MSC). Hacen una labor extraordinaria de educación a niños y niñas. En la mayoría de los casos.

Anónimo dijo...

La estatua es bien fea.
LC