20 diciembre 2017

Eloy Sánchez Rosillo. 18 de diciembre de 2017. Foto: JB

SIN EDAD

En este cuerpo mío que envejece
habita el hombre sin edad que soy.
Cuánta melancolía. Y cuánta dicha.
No sabría decir si, de las dos,
una descuella, pues ninguna acaso
quiere imponerse: se entrelazan ambas
en un sentir más hondo y sin origen.
Los años han caído uno tras otro
—o de golpe tal vez— sobre mi espalda,
pero no sobre mí, que estoy a salvo
en el ser interior que me sustenta.
Miro la noche cálida y silente,
cuajada de luceros que rebullen
allí arriba, remotos, y transforman
en luz también, en lumbre de sosiego,
cuanto se acoge a sus rediles altos.
Noche, noche secreta, noche oculta.
¿Tan secreta? Sí, hermética, enclaustrada
en su abrirse ante todos, en su darse.
Quien en mí la contempla no soy yo
—que ando perdido en mis meditaciones
y no sé cómo estoy balbuceándola—;
es el de siempre y el de nunca, ese
que fue muchacho y hombre adulto y ahora
atisba ya el declive, sin edad,
alguien que está en el mundo y que lo canta
desde un asombro sucesivo y quieto.


ELOY SÁNCHEZ ROSILLO
(De Quién lo diría, Tusquets, Barcelona, 2015)


3 comentarios:

Esteban Linares dijo...

Fue el viernes pasado. Mientras saco de mis bolsillos todo el metal para poder atravesar sin problema el arco de seguridad, veo que alguien lo cruza con prisa, como ausente, o mejor, centrado, concentrado… ¿Eloy?. Otro encuentro fortuito. El anterior fue en el Museo del Prado frente a las Meninas, en aquella ocasión él iba en compañía de Pedro Serna; entonces bromearon conmigo.
Nos saludamos con brevedad, alguien que allí lo esperaba lo recibe con amplia sonrisa. Yo sigo a lo mío: paso por el arco y me adentro en el enorme edificio de la Biblioteca Nacional; nos aguarda, a Marisol y a mí, la espléndida exposición de cartografía desde el tiempo de Maricastaña.
Dos encuentros casuales con Eloy en Madrid, en dos lugares tan emblemáticos. El azar tiene estos caprichos.
(P.S. Si vas a Madrid no te pierdas la exposición: te gustará)

Juan Ballester dijo...

Ya la he visto Esteban, con el plano del Paraiso del Beato de Liébana.

Anónimo dijo...

Buenos días.