Hay un amigo que dice saber de mi estado de ánimo por lo que publico en el blog. Hoy, por ejemplo, supongo que me vería danzando y levantando los brazos al aire de alegría como un adolescente. Pero, ¿será así? Pues no sé, la semana ha tenido momentos para subirme encima de los hombros de alguien y gritar de alegría y otros en los que habría desaparecido del escenario. ¿No será más bien cómo me gustaría estar, que cómo estoy?
2 comentarios:
Las emociones de alegría, tristeza, entusiasmo, desesperación... fluctúan afortunadamente, si no sería imposible vivir. Disfruta unos momentos y ten paciencia en los otros. Eso intento hacer yo.
Buenos días.
En el tiovivo, unas veces pasa el caballo que te gustaría montar, y otras ese coche de bomberos tan horrible que te gustaría suprimir.
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