16 febrero 2019

Pedro López Martínez

Lo que escribía Pedro López Martínez en su blog "Retales de mi alforja", el día veintiuno de enero pasado: "De camino al trabajo, a buen ritmo, los meandros del pensamiento convocan la célebre sentencia de un tal Dostoievski: "Si Dios no existe, todo está permitido". Quizá la gran empresa de Raskolnikov, su criatura, no fue más allá del zarandeo de esa frase, de ese condicional, de esa alerta a la conciencia humana. Y a mi ateísmo resuelto, sin ambages, se le ocurre que mejor que exista ese dios, aunque solo sea de mentirijillas".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenos días.