Cuando decimos que los amigos no suelen superar los dedos de una mano, en realidad estamos diciendo que ni cinco. El retratado de hoy, José Antonio Pardo Cayuela, es uno de ellos; el más antiguo, el más fiel, el más sólido y eterno. Y eso a pesar de que niega mi ayuda prestada durante la Reválida de Sexto.
1 comentario:
Buenos días a los dos.
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