Durante un buen rato los llevaba por delante en mi paseo mañanero por el monte. Inevitable el ir comparándolos, marcando diferencias, analizando los por qué y los para qué, hasta que llegó el desvío y ellos siguieron por una ruta diferente a la mía. Cuando ya caminaba solo pensé: ¿se conocerán este que creo ser, con ese que creen que soy?
1 comentario:
Buenos días.
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