12 mayo 2008

12 AÑOS


Porque nos gustaba escuchar a Roberto Carlos por las mañanas, mientras desayunábamos junto a la ventana de la cocina y mirábamos a las gentes del mercado, un recuerdo muy especial a mi madre.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Ella está ahí contigo cada día mientras desayunas , escuches o no a Roberto Carlos, mires o no a las gentes del mercado.

Anónimo dijo...

Ayer recordaba con Maria Luisa y Tomás como mamá te quería y le contaba lo que dijo hace doce años, el día antes de morir mirándote a los ojos:" hermoso". Todos tenemos buenos recuerdos de mamá, pero yo siempre la recuerdo sonrieno, como en esta foto tan bonica que has puesto hoy. Así que a sonreir que es una buena herencia.
Mónica.

Anónimo dijo...

Ayer recordaba con Maria Luisa y Tomás como mamá te quería y le contaba lo que dijo hace doce años, el día antes de morir mirándote a los ojos:" hermoso". Todos tenemos buenos recuerdos de mamá, pero yo siempre la recuerdo sonrieno, como en esta foto tan bonica que has puesto hoy. Así que a sonreir que es una buena herencia.
Mónica.

Anónimo dijo...

No conocí a tu madre. Pero donde quiera que esté ¡qué orgullosa estará de haber tenido un hijo capaz de dedicarle tan emotivo y dulce recuerdo!

Anónimo dijo...

Es una preciosa foto de una preciosa mujer envuelta en un precioso recuerdo.
Todos tenemos unos hitos que se relacionan con las personas que mas nos han querido. Siempre residen en nuestros recuerdos y son como hilos conductores que nos evocan aquellos momentos felices,
Permíteme que yo también una mi recuerdo al tuyo.
Uno de los hitos de mis recuerdos es “La leyenda del beso”. Mi padre se la dedicaba a mi madre en aquellos legendarios “Discos dedicados” de la radio, con el mensaje que decía algo así “Para Josefina queriéndola mucho”. Lo bailaban en el pasillo y no querían, por pudor, que nosotros los viésemos. Sabíamos que se estaban besando y eso nos daba seguridad y nos hacía felices. Otro hito (quizás tonto este) es la película “La vuelta al mundo en 80 días” Fue la última película que vi con ellos y fue en el Rex.
De todo esto han transcurrido mas de 50 años porque hace 49 que los dos “se fueron” (yo tenía 14 años) y aún no puedo escuchar esta música sin romper la garganta ni ver esta película, cuantas veces la pongan, sin hartura.
Marca carácter.
El amor es, ciertamente, más fuerte que la muerte.
Repito, una bella foto de una bellísima mujer que “ama” y es amada en este hermoso recuerdo.
Man

Anónimo dijo...

Juan, no sé que decir. Es tan íntimo tu recuerdo. Esta vez si he llegado a tiempo ( casi) a Murcia Util, y me he maravillado de tus fotos, de tu apego a las personas que amas de verdad. Tantos años y da la impresión que fue ayer por la forma en que cuentas tus recuerdos.
Además, el comentario anterior es de lo mejor que ví en tu blog. Este Man, quien sea, tiene algo especial.También leí sus notas sobre el tango. Vaya tela lo que sabe y desde luego con buen gusto en la elección.
Un abrazo.
Faustina

Anónimo dijo...

Yo solo quiero decir que me encuentro muy agusto con su recuerdo. Me siento realmente acogido por ella, para nada solo, cuando me hace falta está. Su sonrisa, su mirada por encima de sus gafas, sus manos tan especiales, su albornoz viejo en la playa, los pelillos de la barbilla que le quitaba, su mirada última al irse, su bondad diferente a las demás. Mi madre.

Jose.

Anónimo dijo...

La foto es muy bonita y está guapísima.
Un beso especial y muy grande para todos los Ballesteres.
Luci

Anónimo dijo...

Recuerdo unos días antes de irse, el día de la madre, que apareciste en la habitación con un ramo de flores, inmenso, precioso, lleno de vida, igual que tu, estabas muy guapo con una chaqueta preciosa, y sus facciones casi sin vida, un tanto ausentes, de repente se iluminaron, fue verte y su cara reflejó su emoción, te queria mucho Juan, le debas la fuerza que ella necesitaba, y que con Papa se fue, no sentia celos de ver el cambio, solo sentia como ella, gratitud y belleza, amor , unión, seguridad.... gracias
Tu hermana mayor

Anónimo dijo...

Yo de ella casi ni me acuerdo, era pequeña, y tengos vagos recuerdos.
Pero según tus actualizaciones, y gente que me ha hablado de ella, era una bellísima persona, y además guapa.
Podías presumir de madre con una sonrisa alucinante...
Y cada día,tu hermana Isa se pareca más.

Un beso fuerte Juan.

Luciíca.

Anónimo dijo...

Lo que no se me olvida de mamá es su cara de tranquilidad y felicidad cuando respiró por última vez. ¿Estaría viendo a papá?

Paco Ballester

Anónimo dijo...

Unas semanas antes de su muerte fuí a verla. Estaba acostada, no quería levantarse ni merendar.Cuande entré a su cuarto le dije, Lucía, hoy es mi cumpleaños y vengo a que me felicites; me miró, sonrió y me dijo, ¡qué guapa eres!. Me acuerdo de ella muy a menudo, me enseñó muchas cosas, más que suegra fué madre y en sus últimos meses de vida estuvimos muy unidas. Ahora vive en todos nosotros, su legado es inmortal. Besos a todos los Ballesteres .Piluca

Anónimo dijo...

Paco Ballester, no tengo el gusto de conocerte pero eso que dices y piensas es mucho más que probable. Yo sí lo creo. La victoria de la muerte es solo que nos separa del mundo que “nosotros” conocemos y nos transforma, pero no puede hacer más. Por ejemplo no tiene poder sobre el amor ni sobre las obras de ese amor al que no puede vencer. Por eso el amor es más fuerte que la muerte. Por eso el amor de tu madre pudo contemplar el amor de tu padre. Y ¿cómo se visualiza ese paso de la muerte a la vida? Gran misterio este pero nos anima a estar contento porque si sonrió debió serle grata la visión.
Hay un libro de leí hace ya tiempo y que quizás puede que te guste, “Vida después de la vida”. No es un libro de fe ni hay que tenerla para leerlo.
Man

Jose Pardo dijo...

Mi mas sentido homenaje a vuestra madre.

Anónimo dijo...

A todas las madres Jose.

Juan

Anónimo dijo...

Queridisimos recuerdos guardados en el corazon,los niños,la playa y todos en torno a una mesa sin fin.Lucia y Paco,siempre padres.Muchos besos para todos.isa

Anónimo dijo...

Juan: cuando salió esta foto quise contarte que Mónica, Carmen, Tomás y yo habíamos estado hablando de ella; de cómo me gustaba tu madre y cómo la veía gozar de la vida allí en Los Urrutias y de la obvia debilidad que sentía por su Juanico.
Pero mi torpeza internáutica hizo que este comentario no saliera. Así que tarde, pero segura.
Besos
Ma. Luisa