17 enero 2009

SECUENCIA DEL TIEMPO






Ayer mañana -perdón, ayer por la mañana-, dos chicos en una cafetería junto a un Instituto. No sé a qué jugaban o qué hacían, pero desde luego el de la derecha le ponía tensión y misterio. El 16 de enero de 2039 ¿dónde estarán estos amigos y este momento?


10 comentarios:

Anónimo dijo...

Bonito tema el de esta mañana de sábado; Se ha hablado, se ha escrito tanto y tan bien que solo se me ocurre poner parte de un poema de Tomás Segovia:
Y marcharemos juntos un buen trecho
Cómo negarle eso
Sé que no quiere entrometerse
En mi aprensiva vida
Pedirme juramentos pensar en mi destino
Sólo quiere marchar conmigo un rato
Recordarme que sigue siempre ahí
Y luego ver cómo me alejo
Por donde él ya no se adentra.
marikilla

Anónimo dijo...

HOY 16 DE ENERO DE 2.039

El de la izquierda se llama Tomás y el de la derecha Alfonso. Faltan también Andrés y el Tato.
Tomás vive en Algezares y su familia regenta un pequeñísimo comercio de comestibles con ínsulas de supermercado. Alfonso es de Patiño y su padre tiene un taller de neumáticos. Son amigos desde la primaria. Fueron al Instituto juntos. Allí conocieron a Andrés que era de Santo Ángel y a Antonio (el Tato) que vivía en un chalet en Los Teatinos.
Cuando se reunían; cuando tenían algo importante que decirse, siempre lo hacían en el bar Los Amigos que hay enfrente del instituto. José era el dueño del bar y siempre los miraba con cariño.
Tomás era un chico receptivo, amable y algo tímido. Alfonso era un torbellino extrovertido, con mucho éxito con las chicas. Aunque el rico del grupo era el Tato, Alfonso era más espléndido con el dinerillo que conseguía haciendo algunas chapucicas en el taller de su padre.
Cuando terminaron el bachiller, Tomás consiguió una beca y se fue a Valencia, a estudiar Arquitectura. Alfonso optó por hacer un módulo de mecánica del automóvil. Siendo, como era, el más listo (espabilado) no le iban los estudios. Andrés se puso a estudiar ADE para luego dirigir una pequeña empresa de carpintería metálica que tenía su padre. El padre de Tato se empeñó en que su hijo estudiara Derecho para que se dedicara a la abogacía, como él, pero el muchacho salió “antisistemático” y no había manera de hacerle entrar en razón. Tanto se radicalizó que no era capaz de tener otro tema de conversación.
La ausencia y la distancia fue poniendo tiempos en sus vidas pero antes de separase, conscientes de esto, se hicieron una promesa. “Todos los años, el 31 de diciembre, por la tarde, nos juntaremos sin mediar aviso en el bar de Los Amigos y que José nos sirva una botella de cava. Si alguno no viene, su copa se quedará llena y a nuestro lado”. Y así fue durante muchos años.
Tomás se casó con una chica monísima, estudiante de medicina que le llamaban Marikilla, porque era muy bonita y dulce. Hoy es un arquitecto con renombre en nuestra ciudad.
Alfonso, dio lo que se llama un “braguetazo”, y se casó con la hija de un rico concesionario de coches. Ahora es él el que lo regenta.
Este último 31 de diciembre, se juntaron, como siempre, en el bar Los Amigos y José (que ya está jubilado y le continúa su hijo Pepe) vino, exclusivamente, para servirles, como siempre, las cuatro copas de cava a los cuatro amigos. La copa de Andrés se quedó llena, sin tocar, a un lado. Andrés ya no beberá más de esa copa. Pero Andrés estaba allí, con ellos, y les está espera en el “otro lado”.
Hoy 16 de enero de 2039, Alfonso ha llamado a Tomás para encargarle que le proyecte un chalet para su gran familia (mujer, 5 hijos, padres y suegra).
Por eso han quedado y se han visto en el Bar los Amigos.
¿A quién mejor? ¿Dónde mejor que allí?
Donde antes.
Donde siempre.
Donde la primera vez.

Man

Anónimo dijo...

Una voz suave aumenta los amigos,sean muchos los que te saludan,pero confidente uno entre mil,porque hay amigos de un momento que te acompañan en la mesa y no aparecen en la desgracia.El amigo fiel es un refugio seguro,un amigo fiel es un talismán. Yo creo que estos dos amigos son fieles.

Anónimo dijo...

¿El amigo fiel es un refugio seguro?, ¿para que? Para lamerte tus heridas.

En las desgracias,sean de la indole que sean, es cuando te das cuenta de tu SOLEDAD, tienes que asumirla tu solo. Te pueden dar un abrazo o un rato de compañia, pero tu problema es tuyo y solo tuyo.

Los talismanes solo sirven para colgarselos del cuello o prenderselos en la solapa

Anónimo dijo...

Que drástico eres anónimo!! Hay amigos ...Y amigos!!

Anónimo dijo...

¿No llevo razon en mi comentario anterior?....!Soy drastico!....pues tu ya empiezas haciendo dos apartados: amigos....y amigos. ¿Como llamamos a los primeros.....;?. Y los segundos ¿cargan con tus desgracias?.....

Seamos REALISTAS.

Anónimo dijo...

Anónimo,claro que nuestras SOLEDADES son problemas de cada uno,y como tal se asumen.Pero ten por seguro que si tu compartes con algun amigo,(¨por supuesto menos pesimista que tú)algunas de tus penas pueden ser un poco menos penas.

Anónimo dijo...

¿PORQUE?.......;)

Anónimo dijo...

Querida TOÑI.
Nietzsche dice. “Quien tiene algo por qué vivir, es capaz de soportar cualquier como”. Tú tienes muchos por quién vivir. Muchos. Luego tienes muchos “comos”.
No les robes a los tuyos, lo tuyo que es de ellos. Lo necesitan. ¡Arriba! .
Y tú anónimo, aprendiz de filósofo, (¿eres “mi pequeño saltamontes”?) aprende a no meter el dedo en las heridas ajenas. Y si te va esa marcha, ven y tratalo conmigo.

Man

Anónimo dijo...

Gracias"mi caballero",te leo y no puedo dejar de pensar en mi otro cabellero,y se que se siente feliz y orgulloso en su cielo,de la familia que durante 28 años a disfrutado.Un beso a Man y otro para LUCI, que solo terminar de leer la entrada,me a telefoneado con su cariño de siempre.