EL VIAJE DEFINITIVO
Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando;
y se quedará mi huerto con su verde árbol,
y con su pozo blanco.
Todas las tardes el cielo será azul y plácido;
y tocarán, como esta tarde están tocando,
las campanas del campanario.
Se morirán aquellos que me amaron;
y el pueblo se hará nuevo cada año;
y en el rincón de aquel mi huerto florido y encalado,
mi espíritu errará, nostálgico.
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol
verde, sin pozo blanco,
sin cielo azul y plácido...
Y se quedarán los pájaros cantando.
Juan Ramón Jiménez
9 comentarios:
El viaje definitivo. Era uno de los poemas que más nos gustaban a mi madre y a mi.
Es precioso.
Lucía.
Otro amigo acaba de hacer el mismo viaje, Alejandro ha descansado también. La Alberca es ahora el lugar del poema de Juan Ramón y los demás en la distancia sentimos esa soledad acompañada.
Igualmente encantada de haberte conocido amigo.
Un beso Isa y María.
Mónica Ballester.
Todos hacemos ese viaje,pero JUAN RAMÓN lo describe con una gran sensibilidad.Es un poema precioso.
Mónica lo ha expresado de una forma muy bella. Yo ya no sé ni que decir, ni que pensar.
Un beso muy, muy fuerte a todos y otro muy especial a Isa y María. Me acuerdo mucho de todos vosotros.
Encantada también de haberte conocido "señor simpático".
Precioso poema, no lo conocía. Transmite mucha paz.
Gracias don JB por darnos estas gotas de sensibilidad que nos rescatan y nos dan el alimento para el alma...
La muerte es asi de natural, como la describe el gran poeta.
Muchos recuerdos para todos.
Lu
Otro buen amigo que ya no ha podido luchar mas y que como los otros,ya no sabemos si está mas allí o aquí, si es o fue si sonríe por fin, o no. Poco mas de vacío que no deja de expandirse, como sus fuertes risas en comidas y cenas alrededor de su Heineken, o sus anécdotas de submarinos. Descansa amigo.
Jose.
Es cierto que los pájaros seguirán cantando, pero ya no serán los mismos pájaros. Y el pozo blanco se derruirá y los árboles se secarán y serán talados y las campanas quedarán mudas, pero Luci y Alejandro se volverán a dar un abrazo y juntos estarán descubriendo la promesa de estas palabras:
"Luego vi un cielo nuevo y una tierra nueva - porque el primer cielo y la primera tierra desaparecieron, y el mar no existe ya.
Y vi la Ciudad Santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del cielo, de junto a Dios, engalanada como una novia ataviada para su esposo.
Y oí una fuerte voz que decía desde el trono: «Esta es la morada de Dios con los hombres. Pondrá su morada entre ellos y ellos serán su pueblo y él Dios - con - ellos, será su Dios.
Y enjugará toda lágrima de sus ojos, y no habrá ya muerte ni habrá llanto, ni gritos ni fatigas, porque el mundo viejo ha pasado.»"
Me uno al comentario de Man, que me ha parecido precioso, porque después de leer el poema de J.Ramón Jimenez, me he quedado un poco triste, aunque es muy bonito. Juan Ramón, en uno de sus poemas finales, se reencuentra con ese Dios de su infancia.-
Yo creo que Luci y Alejandro estarán ya gustando de ese mundo nuevo "donde ya no hay lágrimas" y verán al Amor (Dios mismo) cara a cara. Eso es lo que pido yo esta noche para ellos y para todos nosotros, cuando el Señor nos llame.-
Mª Dolores
tRISTE QUIZAS Y BELLO AL MISMO TIEMPO EL POEMA.TRISTE SIN LOS OJOS DE LA FE,TRISTE SIN LAS ESPERANZA DE UNA VIDA QUE CONTINÚA,TRISTE SINO SABEMOS QUE NOS DORMIMOS SIMPLEMENTE EN LOS BRAZOS DE AQUEL QUE NOS DIO EL SER.SOLO NOS LLEVAMOS EL AMOR QUE HEMOS DADO Y RECIBIDO,PUES EL HOMBRE HA SIDO CRESDO "POR Y PARA EL AMOR"SOLO QUEDA ESO:LAS COSAS,LOS PÁJAROS,LOS AHELOS,...INCLUSO LA ESPERANZA,PUES UNA ESPERANZA QUE SE VE YA NO ES ESPERANZA.VEREMOS CARA A CARA EL AMOR.
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