Por habitual parece una escena totalmente asumida, pero a uno no deja de asustarle: ¿Qué sí o qué no espero? ¿Qué importancia tiene un mensaje de otra realidad, frente a la mía? ¿Cómo es posible que casi todo nuestro tiempo y comunicación dependa de esa tecnología? Y claro, al final todo se centra en la pregunta fundamental: ¿Qué busco fuera que ya no tenga? o ¿qué tengo que no me llena?
1 comentario:
Buenos días.
Publicar un comentario