22 mayo 2021

Retrato de Soren Peñalver


LÍNEAS PARA LEER EN MI TRÁNSITO


Los niños que llevaron ramas del álamo
de la plaza de la iglesia a mi cuna,
sabían que el nacimiento es solo un sueño
y un olvido. El alma que mostraba la sonrisa
de mi madre y mi cuerpo menudo al agitarse
estremecido de vida, venían de lejos;
de otra parte, su punto de partida.

Nuestra vida entera está al servicio
de la memoria de lo que nos precedió
y es la nostalgia de lo desconocido.
El árbol viejo maltratado por el vendaval
y del que los pequeños del pueblo tomaron
los ramos verdeargentados, se renovó;
sus hojas y el viento el secreto guardan
de nuestra próxima encarnación, y su rumor
escuchamos...

                A la sombra del álamo,
sentado junto a los ancianos aquí
reunidos, sigue el niño que fui.

Soren Peñalver

 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenos días a los dos.

Bonitas palabras del poeta.